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Origen: China
Nombre químico: Silicato hidratado de aluminio
La arcilla blanca, está compuesta por una rica mezcla de minerales: magnesio, hierro, calcio, potasio, manganeso, fósforo, zinc, aluminio, cobre, selenio, aluminio y silicio que, en particular, le confiere el característico color marfil plateado.
También se le llama caolín, tomando el nombre de la región Kao-Ling de China, donde se descubrió el primer yacimiento de arcilla blanca.
Sus propiedades purificantes y la suavidad de su pH neutro en la piel, hacen que la arcilla blanca sea un elemento valioso para la cosmética natural.
Su suavidad la hace adecuada incluso para pieles más delicadas y maduras que necesitan depurarse y recuperar elasticidad, sin estresar la piel con tratamientos agresivos contraproducentes.
En el rostro, la arcilla blanca se utiliza para la producción casera de cremas y mascarillas, gracias a sus propiedades purificantes, absorbentes y matificantes.
Entre los remedios naturales más efectivos para piel grasa, granos y acné encontramos precisamente la arcilla blanca, capaz de proporcionar una limpieza profunda de los poros, gracias a sus propiedades antibacterianas, sin resultar agresiva en la piel y evitando el riesgo de deshidratación y enrojecimiento.
Para preparar una mascarilla de arcilla blanca para el rostro en casa, simplemente mezcla una cucharada de caolín con hidrolato de rosas, hasta obtener una consistencia densa. Las pieles más maduras, cuyo objetivo no es secarse, sino tonificar, pueden añadir media cucharadita de aceite de almendras o rosa mosqueta.
La mascarilla de arcilla blanca se aplicará en todo el rostro, evitando el contorno de ojos y boca, y se retirará suavemente con un paño humedecido en agua tibia, antes de que se seque por completo y su pasta se endurezca en la cara para disfrutar de todos los beneficios de la arcilla blanca, evitando cualquier estrés cutáneo.
Para el cuerpo, la arcilla blanca resulta eficaz en la prevención y tratamiento de estrías, a través de envolturas remineralizantes, ideales para mejorar el tono de la piel del vientre, glúteos y piernas.
Entre sus capacidades destacan de hecho propiedades drenantes y lipolíticas que la hacen útil para combatir la retención de líquidos y disolver los depósitos de grasa.
Las propiedades de la arcilla blanca para uso externo no se limitan a los efectos cosméticos, sin embargo. También tiene un poder cicatrizante, otorgado por el aluminio, útil en la regeneración de los tejidos cutáneos, y un efecto analgésico en contusiones y esguinces.
Realmente cada parte de nuestro cuerpo puede beneficiarse de las propiedades de la arcilla blanca, incluso los dientes. De hecho, es posible crear también en casa con pocos elementos naturales un excelente compuesto refrescante, antibacteriano y blanqueador. Mira aquí cómo preparar el dentífrico con arcilla blanca en tu casa!
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