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Es el amanecer de un nuevo invierno, y más allá de los días oscuros, los susurros de una multitud que corre, momentos que parecen vacíos cada año, aquí hay migajas de alegría, esperanza y luz. Es aún Navidad, y es tiempo de dar la bienvenida al Otro y a nosotros mismos, regalando gestos que trasciendan lo físico y erijan monumentos duraderos en el corazón.
Terza Luna ha pensado en proponer combinaciones para vivir la mesa como un lugar de encuentro entre afectos, sonrisas y recuerdos, para llevarlos en un viaje entre sabores de la tradición y aromas de tierras lejanas. Como complemento, los dulces son un elemento constante de comidas interminables.
Por eso hemos pensado en posibles combinaciones entre los dulces típicos navideños y nuestros tés raros en venta online. Aquí tienes, en particular, algunos:
Originario de Lombardía, el panettone es un dulce símbolo e histórico de la tradición navideña italiana. Algunas leyendas cuentan que nació por error: en la víspera de Navidad, en la corte de Ludovico el Moro, el cocinero quemó el dulce que había preparado y, para remediar el desastre, un ayudante llamado Toni tomó un trozo de levadura, que amasó con harina, mantequilla, azúcar, huevos, cáscara de cidro y pasas. Así nació un dulce humilde, apreciado aún hoy. Recomendamos disfrutarlo junto con un té negro con notas maltosas y aromáticas: los matices de caramelo quemado, cacao y eucalipto de un preciado Yunnan D'Or se fusionan bien con los tonos afrutados y suaves del panettone, sin contradecirlos.
Preferido por los más pequeños y golosos, el Pandoro es una agradable caricia al paladar. Inspirado en una antigua receta de la tradición veneciana, nació en Verona el lejano 14 de octubre de 1884 y desde entonces es imprescindible en las mesas italianas durante las festividades navideñas. Creemos que las notas florales, delicadas y limpias de un Darjeeling First Flush o de un té verde chino al jazmín, al igual que las más dulces y afrutadas de un Darjeeling Second Flush, se combinan de manera armoniosa con el sabor mantecoso y azucarado de este postre. Un verdadero deleite.
Emblema y eje de la tradición pugliese, hilo rojo que une y llena las diferencias generacionales, con consejos y secretos transmitidos de madre a hija, las cartellate son un dulce típico de la temporada navideña. Los orígenes de esta exquisita delicia, que recuerda a los ojos una rosa arabesca, se remontan al siglo VI a.C., al que pertenece una representación rupestre encontrada en Bari. Recomendamos degustarlas junto con un buen oolong de roca: los acordes minerales y aromáticos de chocolate amargo, madera y violetas del Da Hong Pao se combinan agradablemente con los sabores especiados y melosos de las cartellate, creando una unión, una danza de sabores casi necesaria.
¡Ahora solo te queda experimentar!
¡Felices Fiestas!
