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La antigua tradición del Ayurveda indio atribuye gran importancia a la digestión.
Capaz de proporcionar todos los nutrientes necesarios para garantizar nuestra salud, una correcta digestión nos ayuda a sentirnos más concentrados, activos y equilibrados.
Con los ritmos frenéticos de la vida diaria, tendemos a no tener suficiente tiempo para seguir una alimentación adecuada a las necesidades de nuestro organismo.
Altos niveles de estrés, comidas apresuradas y alimentos con alto contenido de azúcares y grasas son la causa de la sensación de hinchazón y pesadez que sentimos al final del día, acompañada a menudo de irritabilidad, cansancio y problemas intestinales.
La milenaria sabiduría del Ayurveda ofrece en estos casos una valiosa ayuda, sugiriendo botánicas, hierbas ayurvédicas y especias de las cuales obtener ideales tés para digerir y tés para el dolor de estómago capaces de devolvernos fuerza y vitalidad.
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Según el Ayurveda, para regular el delicado mecanismo de la digestión está Agni, el Fuego Sagrado de la tradición india. Ubicado entre el estómago y el intestino y rico en energía cálida, Agni mantiene alta nuestra energía vital garantizando la correcta absorción de los nutrientes alimenticios. ¡Pero no solo eso!
En la fisiología ayurvédica, de hecho, la digestión no solo es responsable de la transformación de los alimentos en energía: todo lo que experimentamos a través de los cinco sentidos es procesado por la digestión. Por esta razón, el Ayurveda enseña que nosotros, los seres humanos, no somos simplemente lo que comemos, sino sobre todo lo que digerimos.
La vitalidad de Agni y una buena digestión determinan nuestro bienestar físico y psicológico. No es casualidad que cuando Agni está en equilibrio y la digestión avanza sin problemas, nos sentimos enérgicos, concentrados, de buen humor y conscientes de nuestras emociones.
Si Agni no está en equilibrio, en cambio, la digestión no puede absorber adecuadamente los alimentos y las emociones. Por eso, a la sensación de hinchazón, pesadez y estreñimiento se suman también tristeza, mal humor, irritabilidad y profundo cansancio.
En la visión del Ayurveda, la digestión lenta y difícil es causada por un desequilibrio de Agni , que conlleva un aumento o una disminución de Pitta, energía cálida asociada precisamente al elemento del Fuego.
Varios factores pueden determinar el exceso o la escasez de Agni , ya que la digestión está involucrada en el metabolismo de los alimentos y en el procesamiento de nuestras emociones.
Una alimentación rica en alimentos grasos, fermentados o demasiado condimentados, acompañada de un temperamento iracundo y colérico, aumenta la energía Pitta y agrava Agni.
Desde el punto de vista de la digestión, este exceso de energía cálida determina presión alta, acidez estomacal, diarrea y reflujo. Irritabilidad, confusión mental, insomnio e impaciencia son, en cambio, las consecuencias psíquicas y emocionales del exceso de Fuego en nuestro cuerpo.
Comer de forma irregular, saltarse comidas o abusar de alimentos astringentes y fríos, especialmente durante períodos de estrés y ansiedad, determinan en cambio una disminución de la energía Pitta y de Agni.
En este caso, la digestión se verá complicada por escaso apetito, hinchazón, estreñimiento, exceso de gases abdominales y retención de líquidos. Tristeza, dolores de cabeza recurrentes, indecisión y poca concentración son las consecuencias psicológicas de la escasez de energía cálida.
Las muchas variables responsables de la ralentización de la digestión hacen difícil indicar un remedio único y universal capaz de devolver a nuestro organismo su equilibrio natural. En caso de digestión difícil, es una buena costumbre prestar atención a nuestro cuerpo y emociones para entender lo que necesitamos.