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El Hibisco (Hibiscus sabdariffa L.), conocido como Karkad, Carcad o Té rosa de Abisinia, es una planta arbustiva perteneciente a la familia de las Malvaceae, especialmente conocida por sus flores. El hibisco es originario de las Indias Occidentales, pero también se encuentra en Asia (India, Sri Lanka) y África (Etiopía, Sudán).
La parte de la planta con mayor contenido de sustancias características es el cáliz de las flores de hibisco, que durante la floración se vuelve carnoso y de color rojo violeta. En el cáliz se encuentran ácido hibíscico, ascórbico, málico, cítrico y tartárico que le confieren un sabor ácido y antocianinas que le dan el color rojo.
El té de hibisco es conocido por muchos como una bebida refrescante. Las flores también se pueden utilizar en combinación con otras plantas para dar a las infusiones el sabor ácido característico y el color rojo. El hibisco tiene propiedades y beneficios, y estudios recientes han demostrado resultados prometedores en la reducción de la hipertensión y los niveles de colesterol.
La infusión de Karkad se consume principalmente durante los meses de verano por ser una bebida refrescante. A las flores de hibisco también se les atribuyen propiedades antioxidantes, antiinflamatorias, antipiréticas, analgésicas y antibacterianas, pero los estudios disponibles se centran principalmente en su acción sobre la hipertensión y la hiperlipidemia. En particular, el carcad parece ser efectivo en el tratamiento de la hipertensión leve y moderada, ya que podría reducir la presión sistólica (SBP) y diastólica (DBP).
En cuanto a su acción sobre el perfil lipídico, el consumo de hibisco parece reducir la oxidación de las lipoproteínas LDL, así como los niveles de colesterol LDL y triglicéridos, sin afectar generalmente al colesterol HDL. Los resultados de los efectos sobre la presión y el perfil lipídico son prometedores para un posible uso del hibisco en la prevención de enfermedades cardiovasculares, pero se necesitan más estudios e investigaciones. Además, parece que el carcad no tiene efectos secundarios relevantes y es un remedio bien tolerado, aunque puede interactuar con algunos medicamentos (como el paracetamol).
[Fuentes: Hopkins AL, Lamm MG, Funk JL, Ritenbaugh C. Hibiscus sabdariffa L. en el tratamiento de la hipertensión e hiperlipidemia: una revisión exhaustiva de estudios en animales y humanos. Fitoterapia 2013, Mar;85:84-9]
El hibisco también se utiliza tradicionalmente para resfriados, catarros, trastornos circulatorios, falta de apetito y como suave laxante y diurético. Junto con otros productos, es uno de los mejores infusiones para resfriados y congestión respiratoria. Las partes de la planta utilizadas en fitoterapia son las flores, pero en ciertas preparaciones herbales también se utilizan hojas, semillas y raíces. Por ejemplo, el aceite esencial obtenido de las semillas de hibisco tiene propiedades hipocolesterolemiantes (mencionadas anteriormente) debido a su alto contenido de ácidos grasos esenciales y vitamina E. Las hojas, por otro lado, pueden consumirse en ensaladas por sus propiedades refrescantes, emolientes, sedantes y diuréticas. Las flores tienen un efecto diurético y son útiles como antiarrugas. A menudo se utilizan en la cocina para preparar salsas, gelatinas, mermeladas y vinos. Las raíces de hibisco, gracias a su sabor amargo, se utilizan en la industria de licores en la producción de amargos.
A todo esto se suma el excelente sabor de la bebida obtenida de las flores de hibisco, su alto contenido de vitamina C, antioxidantes en forma de polifenoles y flavonoides, en resumen, un aliado perfecto para el verano.
En esta temporada, puedes preparar una bebida o té frío de hibisco, muy refrescante y fácil de hacer, que muchos conocemos como tisana al karkad.
Para 1 litro de bebida
Recuerda: ¡el hibisco no contiene teína! Si deseas incluirla en tu preparación, deberás añadir tu té favorito.
